¿Qué es entonces la actitud positiva? Blay hablaba del termino positivo en tanto en cuanto “poner” y si lo miramos bien esto es muchísimo más movilizador que todo lo descrito anteriormente; primero porque requiere un mantenerse despierto el tiempo suficiente que me permita constatar que esa presencia eterna que me acompaña cuando me hago consciente de mí, está hecha de unas cualidades básicas, intrínsecas y genéricas que construyen mi naturaleza esencial y espiritual: capacidad de ver, capacidad de amar y capacidad de hacer. Y segundo porque he de entregarlas, sin reservarme absolutamente nada, al servicio de la existencia. Conviene no olvidar que ese Potencial no es una posesión mía más de las muchas que atesora el personaje, es algo que Dios me presta, es decir, estar está sin lugar a dudas dentro de cada uno de nosotros porque es lo que somos, pero no está garantizado que cumpla la misión de expresarse conscientemente en este mundo, precisamente porque soy yo dentro de mi libertad individual el que puede abrir el grifo o no para que esa “imagen y semejanza de Dios” en mí, se convierta en un nosotros.
Una vez abiertas las compuertas a lo Superior, nos vamos convirtiendo poco a poco en instrumentos conscientes en manos de Dios, un canal más para que se exprese Su Plenitud en la tierra. De manera que ya no voy a perder el tiempo en sacar cuentas de lo que pueden reportarme mis actuaciones, ni esperaré que suceda algo externo que me de la felicidad que anhelo. Todo lo contrario, la actitud positiva implica vestirse con el mejor “mono de Trabajo” que tenemos, porque cuando Dios se pone a trabajar a través de mí, es su Potencial ilimitado de luz, amor y energía el que reforma y mejora la realidad que me encuentro a mi paso; y no hay mayor gozo en esta vida que tener la suerte de observarlo.
Así que desde esta familia creciente que es la asociación para el desarrollo de la conciencia y la autorrealización, os invitamos a que en este 2021 examinemos nuestras conductas en la vida diaria y pongamos de nuestra parte para ser consecuentes con este principio de actitud positiva, interiormente serena, pero exteriormente muy dispuesta. Y Entreguemos la inteligencia, amor y energía que somos al servicio de mejorar mi entorno individual, colectivo y asociativo; busquemos sin descanso la afirmación de Dios en nosotros.
Feliz actitud positiva para el 2021.