Ocuparse demasiado de uno mismo produce una terrible fatiga….. Y que me lo digan a mí, cierto como la copa de un pino. El estar siempre pendiente de la imagen que uno ha elaborado y que ha de mantener contra viento y marea porque vaya que te vean diferente a como siempre has sido…..es muy fatigante. En mi caso cuando he mostrado otra imagen que no suelen ver me dicen: ¿te pasa algo? ¡Te encuentro rara! Pero poco a poco dejo de preocuparme y los demás van habituándose. O sea no me importa mantenerme en el segundo plano, antes me costaba la vida, yo tenía que destacar, tenían que verme, ¡¡eh, estoy aquí, mirad qué simpática soy, …!! Afortunadamente me voy desprendiendo de esa necesidad y me quedo en otro plano sin necesidad de demostrar nada. Y es cierto que ese desgaste de energía anterior ya no lo tengo y empiezo a ver a los demás.