Acabamos el ciclo de El séptimo Sello con unos apuntes sobre su director:
Ingmar Bergman fue un guionista y director de teatro y cine sueco. Considerado uno de los directores de cine clave de la segunda mitad del siglo XX, es para muchos, el más importante productor de la cinematografía mundial. ,
En pocos cineastas se identifica tanto vida y obra como en Ingmar Bergman. Educación, vida conyugal, angustias, dudas y esperanzas, soledad, conforman el universo fantasmal de un director atormentado
Ingmar Bergman, nació en 1918 en Upsala, Suecia, en el seno de una familia luterana, cuyo padre era pastor de almas. Tuvo una educación rigorista que le marcó. En sus memorias, con respecto a la relacion con sus padres, destacan las desavenencias y los recuerdos de castigos y conceptos religiosos, que en vez de acercarle de Dios, lo distancian.
Estudió arte y literatura en la Universidad de Estocolmo. Se movió por ambientes bohemios y cultivó el existencialismo.
Debutó como director en 1944 con el significativo título de Crisis. Todos sus filmes tienen un toque personal y elementos autobiográficos.
Su búsqueda de lo trascendente comprende un largo recorrido fílmico, que va desde El séptimo sello (1957), pasando por Fresas salvajes (1957), El rostro (1958), El manantial de la doncella(1960), hasta la trilogía Como en un espejo (1961), Los comulgantes (1963) y El silencio (1963), donde aboca en un agnosticismo desesperado. El último film en cine como director, Fanny y Alexander (1984), dibuja su vida de infancia. A partir de aquí otros filmarán sus guiones, basados en recuerdos familiares.
Falleció el 30 de julio del 2007
En el Séptimo Sello, a modo de tablero de ajedrez, la película combina los blancos y los negros en armonías altamente simbólicas de gran belleza. Bergman utiliza a plenitud el paisaje, especialmente los cielos y el mar. Se dice que la escena final, en la cual la muerte se aleja danzante en una colina lejana, con los personajes que han muerto, fue filmada cuando el director se dio cuenta de los tonos misteriosos del cielo, a pesar de que ya se había terminado el día de filmación. Esa escena final es ciertamente una joya del cine.
Gracias por vuestras aportaciones. Un abrazo