Jaume Arasa tiene treinta y ocho años, y hace diecisiete que entró en la Escuela de Policía de Catalunya. Actualmente pertenece a la Unidad Canina de los Mossos de Esquadra.
-¿Como se le ocurre a un chico de veintiún años hacerse policía?
– Primero quería ser agente rural, pero convocaron antes las oposiciones a mosso, me presenté y me cogieron. Fue un poco por casualidad, así y todo siempre he tenido esta vocación de cuidar a la gente. En el colegio siempre tenía este sentimiento de protección a la comunidad. Los quería y los protegía, por eso me hice mosso y me siento bien siéndolo.
-No debe ser fácil…
-Me costó. La gente no es consciente de lo que llega a pasar en la calle. Y cuando lo vives ocho horas de forma continuada es bastante duro: violencia doméstica, robos, peleas,…O te fortaleces o te coge una neurosis, y la parte espiritual me ha ayudado mucho en esto. Antes me ponía muy nervioso en situaciones conflictivas y ahora intento estar presente en lo que pasa. Me sirve para centrarme.
-¿Como llegas a la espiritualidad?
-Hace unos ocho años lo pasé muy mal: a nivel personal estaba muy roto —¡hasta me plantee dejar la policía!— y entonces escuché unos audios de Antonio Blay que me cambiaron la vida porque me transmitían algo muy potente. Después conocí a un alumno suyo, Jordi Sapés, que ha hecho que todo ese trabajo que planteaba Blay lo pudiera llevar a la práctica. Es una espiritualidad que es más bien un camino de autorrealización.
-¿Y cómo es la práctica de la autorrealización, en tu día a día, en tu trabajo?
-Miro de ser mucho más objetivo, observándome, y estar abierto al máximo. Estar lo más consciente que puedo, tanto a nivel físico, afectivo como intelectual. Intento también comunicar esto que vivo, por eso propuse de hacer unas jornadas en la Escuela de Policía, el año 2013, con el título: «Policía y Consciencia», con conferencias de personas relevantes en este tema. Y cuando el 2015 se hizo el Código Ético de la Policía de Catalunya, propuse incluir el valor de la «autoconsciencia», y actualmente, la palabra está recogida dentro del valor de la Templanza.
-Vuestro trabajo parece poco valorado, ¿Cómo lo vives?
– Lo vivo de forma ambivalente, porque me sabe mal de cara a la sociedad, pero también me sabe mal de cara al colectivo, porque hay gente muy maja. Y se me hace difícil. Estoy en la Unidad Canina, en explosivos, nosotros vamos cuando la gente se va corriendo, nosotros vamos a detectar los explosivos. Es nuestra obligación, pero se hace necesario recordar que la vida de un policía tiene el mismo valor que otra vida humana…
-¿Tienes miedo?
-A veces sí que tengo, pero cada vez menos porque este trabajo interior hace que pierdas el miedo porque vas siendo más consciente de ti y vas creciendo. No tengo ganas de morir, pero si viene, es mi trabajo.
-La autorrealización te lleva finalmente a la espiritualidad. ¿Cómo fue esta experiencia?
-Un día fuimos al monasterio de Oseira (Ourense) para contactar con esta parte más espiritual con la ayuda de personas que se dedican desde hace siglos, como son los monjes cistercienses. Fue una experiencia brutal. El hecho de no hacer nada, solo prestando atención a esta parte superior, hizo que notara como subía de grado y entrara en otra atmósfera…Es muy sutil, es muy sencillo, pero es transformante. Ahora miro de volver una vez al año, y he dejado las reticencias que podía tener con la Iglesia para centrarme en la experiencia que me transmite. El cristianismo ha aportado unos valores que cabe agradecer, un trabajo de base muy fuerte que ha hecho evolucionar la humanidad, la persona.
-¿Hablas de Dios?
-No me siento incómodo con la palabra Dios, pero es igual la palabra que le pongamos, lo podemos llamar: punto superior, calma oceánica… da igual, la cuestión es que lo experimentes y constates que modifica la visión que tenías de la realidad y lo puedes aplicar al día a día, estando presente.
A pie de calle
“A pie de calle” quiere ir al encuentro de personas sencillas que, sin hacer ruido, por el solo hecho de existir y dar un sentido a la vida, dejan huella.
Laia de Ahumada
Fuente: Revista Dialogal, núm.58
www.dialogal.org
Autora: Laia de Ahumada
www.laiadahumada.blogspot.com.es
Traducción al castellano: Jaume Arasa
Gracias Jaume por la labor que haces para difundir el Trabajo y la voluntad de incluirlo en tu actividad cotidiana. Me parece muy necesario aparte de transformador para ti. Estoy segura de que es una excelente manera de actualizar el potencial y profundizar en lo que somos en esencia. Además, ejercitando conscientemente la actitud positiva, estás ayudando al colectivo a despertar y contribuyendo a experimentar la Unidad. ¿Cómo es la experiencia con tus compañeros al darles a conocer el Trabajo? La verdad es que desconozco el funcionamiento interno de vuestro trabajo pero me parece un ámbito en el que, de manera especial, hablar del despertar puede aportar mucho y ser transformador. Te animo a que sigas llevando a cabo esta interesante y fructífera labor que redunda en el bien común y a que sigas compartiéndola con nosotros.
Jaume, agradezco tus palabras y agradezco el haberte conocido: conocerte ha supuesto romper un monton de etiquetas absurdas, ideas preconcebidas y tonterias varias que poblaban mi mente. Importan las personas, la percepcion directa de la interioridad, el vinculo que se va construyendo. Y has humanizado tu profesion, tantas veces mal valorada. Muchas gracias, compañero.
Gracias Jaume por compartir tu experiencia, nos demuestra una vez mas que cuando subes tu nivel de conciencia, repercute en el colectivo donde te mueves, subiendo el nivel, y lo que propones, llega. Un abrazo
Muchas gracias por esta entrevista, Jaume. Siempre es reconfortante conocerte y conocer un poco más de un trabajo que a muchos, a veces, se nos escapa. Aunque cuando conozco a un policía, si la situación se presta, me gusta saber cómo es su trabajo. Me parece magnífico el espíritu de servicio a los demás que siempre has tenido (recuerdo que hace un par de años, cuando íbamos juntos a Oseira, en el aeropuerto ibas barriendo con tu mirada al grupo que íbamos desde Catalunya para ver que todo estuviera en orden y que llevásemos todos los paquetes. No lo podías evitar). Al igual que Leyre, también estoy bastante intrigado en saber qué les parece el Trabajo en la línea de Blay a los compañeros, ya que estas iniciativas desde la espiritualidad que has introducido en tu trabajo están geniales. Por todo, brindo por ti
Mil gracias por el articulo Jaume, en todo esto hay un cierto riesgo y no es otro que convertir el Trabajo en una serie de ideas más, para después archivarlas en el departamento de ideas sublimes de nuestro disco duro particular, con tu ejemplo nos demuestras todo lo contrario, un abrazo compañero.
Lo transmites muy sencillo Jaume y eso da fe de que lo llevas incorporado; transmites muy bien lo que el Trabajo te ha aportado y a la vez lo que tu has aportado a tu entorno laboral. Hace poco que he visto un programa de policias en acción o algo así en la tele; yo no me imaginaba la cantidad de veces que actúan como mediadores y vi la importancia que tiene para éste gremio tener una psicología bien estructurada. Si a eso le añadimos un trabajo interior que fomente el no responder de manera automática ante ciertas situaciones que suelen ser bastante conflictivas pues creo que se puede hacer mucho bien. Enhorabuena pues por todas las aportaciones que estás haciendo en éste sector.
Gracias a todos por vuestros comentarios.
En relación a lo que me preguntáis tanto Leire como Miquel, ya sabéis bien el cambio de enfoque que te da la vida cuando empiezas a despertar, lo ves como algo revolucionario en ti y quieres que todo el mundo se entere y despierte, ese motivo me llevó a hacer las propuestas de cambio que salen en la entrevista. Pero con las experiencias que vas viviendo, te das cuenta que cada uno está en un proceso vital distinto y tampoco es bueno forzar nada. Así que en este momento estoy viviendo la situación con más naturalidad, sigo auto observándome mirando lo que no acepto y haciendo lo que la situación diaria me ofrece. Tengo la suerte de tener una gran mujer al lado y unos hijos a los que acompañar, así que de momento ya estoy haciendo lo que he de realizar. Puede que más a delante se dé una oportunidad de poder hacer algo más relevante socialmente, entonces si veo que con mi acción se puede mejorar algo, ya participaré.
Un abrazo.