Nombre del autor:info@contraluzproducciones.com

¿Los valientes no lloran?

Cuando mi hermano y yo éramos niños solíamos jugar a béisbol. Aunque no tendríamos mucho más de 10 años, llegó un día que nos dejamos de chiquilladas y empezamos a jugar como profesionales: Teníamos un robusto bate de madera mayor que nosotros y, aunque solíamos batear pelotas de tenis, un día compramos una pelota de cuero que pesaba un quintal, cuyo corazón siempre imaginé de hierro.

¿Los valientes no lloran? Leer más »

Scroll al inicio
logo.adca
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.