En “Alicia en el país de las maravillas”, hay una anécdota muy divertida: Alicia y la Reina corren a toda pastilla y, de pronto, Alicia cae en la cuenta de que el paisaje no cambia. Extrañada, Alicia le pregunta a la Reina qué está pasando; y esta responde: es que corremos tanto para conseguir mantenernos en el mismo sitio.
Este fenómeno describe muy bien la existencia del personaje: corre constantemente para no perder lo poco que tiene y mantenerse en una realidad que le disgusta. Su mundo está lleno de paradojas: Si le preguntas al personaje qué ha pasado hoy, lo habitual es que te responda que no ha pasado nada. Y si no te conformas con la respuesta te explica las cosas que no han sucedido; por ejemplo: hoy tampoco le ha tocado la lotería.
Su realidad está llena de acontecimientos en los que no cree: No cree lo que ponen los periódicos, o lo que dicen los políticos, o la Iglesia… Hace unos días encontré un conocido que no cree en la Bolsa.
Los que creen que Jesucristo vino a salvarnos del infierno, están permanentemente preocupados por no ir al infierno; los que predican la castidad, no piensan en otra cosa más que en el sexo; los que tienen trabajo temen el paro… Es como si todo estuviera mal pero pudiera estar mucho peor.
Y entonces llega el Trabajo y dice que la realidad está hecha de Inteligencia, Amor y Energía. Así que, seguramente, los periódicos cuentan bastantes cosas, los políticos conducen el país por un determinado camino, la Iglesia resalta la dimensión espiritual del hombre, la Bolsa revela los fallos del sistema, el infierno está en la mente, el sexo es la expresión física del amor y los que tiene trabajo están en condiciones de preocuparse por aquellos que no lo tienen.
Esa es una de las virtudes que tiene el Trabajo: nos hace contemplar la realidad. Porque si es absurdo que corramos tanto para mantenernos en el mismo sitio, más absurdo es que, encima, no le prestamos atención a esta realidad permanente, constante y aburrida en la que estamos instalados.
A veces parece que sólo intentan influir en el mundo los muy buenos, como Vicente Ferrer, o los muy malos como los traficantes de armas, drogas y especuladores internacionales
¿Y nosotros qué? ¿Sólo pasábamos por aquí?
¿Vamos a leer este artículo pero ni tan solo lo vamos a comentar? ¿Preferimos seguir probando a ver si nos toca la lotería?
Pasaba por aquí, leí y asentí a la verdad… ya comentaran otros. Después de cerrar la página intuí que aunque me tocara la lotería, la sensación interior de que todo sigue en el mismo sitio continuaría. Me dije que al contestar, al menos rompía el sueño del personaje durante unos minutos.
Si me tocará la lotería, emplearía el dinero de forma consciente; creando una empresa que respete el entorno ambiental y la individualidad de los empleados, que contribuya a potenciar el amor, la inteligencia y la energía de todos que la componen y de sus clientes. Pero no hace falta dinero o empresa para colaborar a que el Trabajo obre en el Mundo.
Somos un grupo de Debate de A Estrada (Pontevedra), hemos empezado a tomar como temas a debatir los textos publicados en ADCA, la mayoría seguimos el sistema de Trabajo ideado por Jordi Sapés. Somos Carmen, Ana, Klaus, Mila y Félix.
Este sábado elegimos: ¿Por qué corremos tanto para mantenernos en el mismo sitio? En la paradoja de Alicia y la Reina, vemos que Alicia , se da cuenta que el paisaje no cambia, y en la Reina vemos el estrés angustiante y obsesivo del personaje, que nos mantiene en el mismo estado; y como no es capaz de parar no consigue ver lo que sucede realmente a su alrededor.
Nos surgió el refrán “Más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer” como sentencia básica del personaje para amargarse la vida. Y de aquí salió a colación “La Historia del Martillo” (http://saberloquebusco.blogspot.com.es/2007/09/cuento-del-martillo.html), donde el personaje logra a través del simple hecho de colgar un cuadro, desquiciarse y enfurecerse de tal modo que acaba insultando al vecino del martillo que necesitaba, sin ser éste consciente de nada.
Llegamos a estas conclusiones:
1. Desde el personaje se vive en un continuo estrés angustioso, temeroso, obsesivo, de hábitos y actitudes aprendidas y fomentadas por él, que nos mantiene en el mismo sitio, en lo malo conocido e insultando al vecino. Dormidos, somos nosotros quienes creamos las mayoría de los problemas y nos parecen insalvables.
2. Que cuando paramos esta carrera a ninguna parte, tomamos conciencia de uno mismo y de las cosas, vemos la realidad tal cual Es.
3. Estando despiertos, las situaciones ni son buenas por conocidas ni malas por desconocidas, son lo que son, de este modo colgar un cuadro resulta un hecho sencillo. Si el vecino se niega a dejarnos el martillo llamaremos a las puertas que haga falta para conseguirlo. Siendo conscientes que somos Inteligencia, Amor y Energía las dificultades se convierten en oportunidades de desarrollar esto que somos.
Seguiremos debatiendo y participando con ADCA.
Un saludo a todos, desde Galicia.
Antes de nada, felicitaros por vuestra excelente iniciativa, y desearos que os enriquezca tanto como todas las otras actividades relacionadas con el trabajo que estamos haciendo.
Vuestras conclusiones me parecen una magnífica miniguía de vida porque, interiorizando y aplicando en nuestros quehaceres cotidianos estos tres puntos, todo lo que nos ocurra lo vamos a poder afrontar desde esta perspectiva y verlo y vivirlo de forma mucho más plena y, lo más importante, real.
Lo dicho, mucho ánimo y gracias por vuestra aportación
Felicidades Galicia por compartir vuestro trabajo es una gran idea compartirlo con todos nosotros, espero que seáis un ejemplo para todos y que pronto podamos decir, Gracias Madrid, Sevilla, Asturias,Valencia, León….
Me parece que acostumbramos a dar una ezplicación del personaje que se corresponde solamente con su versión más exagerada (caricaturesca casi). Un buen ejemplo de lo que digo se encuentra en estos mismos comentarios: «Desde el personaje se vive en un continuo estrés angustioso, temeroso, obsesivo, de hábitos y actitudes aprendidas y fomentadas por él, que nos mantiene en el mismo sitio, en lo malo conocido e insultando al vecino. Dormidos, somos nosotros quienes creamos las mayoría de los problemas y nos parecen insalvables.»
Siempre he dicho que hay mucha gente (en mi entorno al menos la hay) que a pesar de estar en el personaje vive en el aquí y el ahora y está movilizando su potencial continuamente para incidir en la realidad. Gente positiva, abierta que para nada está siempre en el mismo sitio.
De hecho, a menudo me pregunto, ¿cómo es posible que habiendo hecho todo el trabajo interno que he hecho funciono igual o incluso peor que Fulano o Mengano?
Resumiendo, las explicaciones de trazo grueso no acaban de convencerme. Y personalmente creo que es esta gente más despierta la que más fácilmente se puede acercar al Trabajo y por eso conviene tener un discurso con el que se identifiquen (no el del agonias que está siempre quejándose)
Gracias a Dios, el personaje no suele acaparar por completo la totalidad de la conciencia y deja mucho espacio a la personalidad. Desde la personalidad, la gente actualiza su potencial respondiendo a las tareas que la vida les presenta: familiares, laborales, sociales…; y la existencia les da la oportunidad de desarrollarse más todavía cuando se han de enfrentar con los obstáculos y situaciones problemáticas propias de este nivel material.
Lo cual no quita que podrían desarrollarse mucho más si el personaje dejara de interferir en su conciencia. Yo no hablo de la gente con trazo grueso, sino del personaje, que es como una especie de enfermedad mental. Sin esa enfermedad, estas personas estarían,sin duda alguna, mucho mejor.
El problema es confundir el personaje con la personalidad. Cuando tú dices: «están en el personaje» yo leo «su mente está llena de prejucios limitantes en relación con la realidad o consigo mismos». Y quizás tú quieres decir otra cosa. A lo mejor estás hablando de su personalidad. Seguro que hay mucha gente que nunca ha oido hablar del Trabajo y son una manifestación patente del desarrollo que puede alcanzar el ser humano.
Hola Pedro, que gusto verte por estos foros¡¡¡
Me parece que tu puntualización es de lo más acertada. Al fin y al cabo no queremos cambiar sino actualizar lo que ya somos.
Agradezco y celebro mucho el comentario de Pedro pues estoy totalmente de acuerdo y me parece que tratar sobre el personaje está quitando últimamente bastante espacio a otras aportaciones de la línea de Trabajo de Antonio Blay, a cual más constructiva, seguro que interesantes para el neófito de esta línea. Por otro lado todos sabemos que la línea de Trabajo de Blay está basada en la experiencia y en el deseo de Blay estuvo que su línea no cristalizara en una religión, férrea y dogmática. Si está basada en la experiencia es lógico que ella misma se preste a ser mirada con nuevos ojos siempre, ahora también.
Un abrazo,
David
El personaje ha salido a colación a raiz del resumen que ha elaborado el grupo de socios de Galicia y que ha publicado Félix. Sólo quiero resaltar que, en esta línea de Trabajo, hablamos del personaje para, de inmediato, aportar los medios y la manera de dejarlo atrás. Y eso se resalta en el propìo artículo y en las conclusiones de esta comunicación: hablan del personaje pero también del despertar; y de ser conscientes de ser inteligencia, amor y energia.