III Congreso “Práctica de la obra de Antonio Blay”

Jordi: Nuestra ponencia quiere presentar un problema concreto: la necesidad de tener presente a Dios o, lo que es lo mismo, la naturaleza espiritual del ser humano, porque todos los proyectos que se han expuesto en las ponencias anteriores necesitan el auxilio de lo Superior.
Maju: Una persona despierta, ¿puede pretender desarrollar los proyectos que se han expuesto sin la ayuda de lo superior? ¿Por qué se necesita ese auxilio de lo Superior? ¿No estamos ahora echando un jarro de agua fría sobre las intenciones que hemos planteado a lo largo del Congreso?
Jordi: Al contrario, estamos resaltando que estos propósitos que hemos planteado son factibles, pero también queremos dejar claro que no son fáciles de conseguir ni los vamos a llevar a término a corto plazo, más bien los hemos de ver como una carrera de fondo que exigirá una gran fe por nuestra parte: fe en el ser humano y en su vertiente espiritual. La atención y el esfuerzo que ponemos para resolver los asuntos de nuestra vida diaria no son suficientes para llevar adelante todos estos proyectos. Son muchas las dificultades que nos vamos a encontrar; a corto plazo seguro que tendremos que luchar con la idea de que esto que defendemos es imposible porque la mayor parte de la gente con la que hablemos de esto ni tan siquiera se van a sentir concernidos. Así que nos va a hacer falta toneladas de fe, en el sentido de creer en nosotros mismos y de apoyarnos en nuestra naturaleza esencial.
Igual lo que planteamos parece una utopía, pero nosotros entendemos que el ser humano ha sido creado para vivir en una dimensión superior a la actual. Para nosotros esta afirmación no es utópica porque ya lo estamos experimentando, pero tenemos que mantener esta experiencia en medio de un ambiente que no nos es propicio, y este es el auxilio de lo Superior que recabamos. Blay habla de la actitud positiva como forma de desarrollar nuestra existencia cuando despertamos y tomamos conciencia del potencial que somos; pero esta actitud positiva requiere visión de lo que es posible hacer y voluntad para luchar por conseguirlo. Sin predicar nada utópico, pero poniendo el acento en lo que nos hemos propuesto hacer más que en unos resultados que están por venir. Aquí hemos de hablar de fe en el propósito, convicción de que es posible, y de vocación en nuestra voluntad de llevarlo a término: compromiso de materializarlo. Y tanto la fe como la vocación las encontraremos en el centro de nuestra conciencia, allí donde Dios está presente y pone a disposición su inteligencia, su amor y su energía; con un plus que a menudo se necesita cuando queremos abordar asuntos de este calibre.
Juan Maria: Hay dos maneras de actuar para llevar a término todo esto: manifestar lo que uno ve, lo que uno intuye como posible, o mostrarlo en silencio con su propia existencia, con su forma personal de responder a la realidad que nos llega. A veces nos encontraremos en situaciones y ambientes en los que resulta posible plantear propuestas y hacer reflexiones, pero en muchas otras situaciones solo podremos predicar con nuestro ejemplo, resaltando otros valores más esenciales, ni que sea tan solo para llamar la atención. Cristo profetizó hablando, al tiempo que daba una respuesta diferente a la que se tenía por correcta, pero también lo hizo muriendo, en silencio, porque carecía de sentido discutir con los que le condenaron.
Nosotros debemos incorporar esta dimensión profética en nuestra vida simplemente porque el ser humano lleva consigo el germen de la trascendencia. Creer en la dimensión profunda del hombre implica creer en Dios; y este hombre profundo no puede colaborar o permanecer neutral ante la mediocridad que define nuestra existencia actual: mediocridad en la sociedad, en la política y también en la Iglesia, que se ha quedado en conceptos e ideas, exclusivamente destinados a mantener su dimensión exterior: la carcasa. El hombre despierto consciente de su naturaleza espiritual ha de oponerse a esto forzosamente.
Jordi Sapés, Maju Rodríguez, Juan María de la Torre
III Congreso “Práctica de la obra de Antonio Blay”. Ponencia 7: “ El compromiso esencial”. Barcelona 01 de Noviembre 2022.
Aquí puedes ver la siguiente entrega de esta ponencia: